Hoy hablamos de otro elemento imprescindible del maquillaje, los delineadores de ojos. Los hay de todos los colores y formatos. En lápiz, en boli, líquido, en gel... Me atrevería a decir que es el elemento más usado del maquillaje, por el que todas empezamos y nos vamos enganchando a este mundo.
Un buen delineado nos cambia totalmente el rostro y ya depende del gusto lo haremos más dramático (ojos de gata) o más natural. Se usa sobre todo para agrandar el ojo pero también para cambiar la forma del mismo. Ahí está la mayor tarea, ir probando que tipo de delineado nos favorece más.
Después de muchos años probando todo tipo de formatos, sin duda, el que más me gusta es el de gel. Es el que se queda más negro y se pega a la piel durando horas y horas. Mi párpado es muy graso y los lápices no tardan en difuminarse y ensuciar mi ojo en poco tiempo, el delineador líquido me resulta demasiado dramático para el día a día y más difícil de aplicar, sin embargo, el gel cubre todas mis necesidades, no es difícil de aplicar con un pincel biselado, dura muchísimo y no se va con la grasa de mi párpado. También es el que mejor me viene para la línea del agua ya que mi ojo lagrimea constantemente y el lápiz se va rápidamente y lo que es peor, dejando rastro.
He probado varios delineadores en gel pero mi favorito es el de Maybelline, su nombre exacto es "Eyestudio Lasting Drama" y viene con un pincelito que es perfecto para su aplicación. Su precio ronda los 8€, lo compré en Mercadona y he de decir que aunque su precio es más alto que un delineador en lápiz merece mucho más la pena, dura años y su calidad es mucho mayor. Su aplicación es muy suave y no se seca con el tiempo como le pasa a otros.
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